Por Norma R. Guillard Limonta
(Psicóloga Afrocubana, Feminista y Comunicadora. Miembro de la Sociedad Cubana de Psicología).
La poeta negra lesbiana Audre Lorde en uno de sus poemas nos dice:
Mujer
Sueño con un lugar entre tus pechos
Para construir mi casa como un refugio
Donde siembro
En tu cuerpo
Una cosecha infinita
Donde la roca más común
Es piedra de luna y ópalo ébano
Que da leche a todos mis deseos
Y tu noche cae sobre mí
Como una lluvia que nutre.
Si analizamos este poema podemos afirmar que el amor de las lesbianas es un amor igual que otro. Entonces, pregunto: ¿por qué costará tanto entender algo tan sencillo como el hecho de que el amor no entiende de género ni color?